La Comisión Federal de Comercio presentó una enmienda a su demanda contra la empresa de viajes compartidos Uber, alegando prácticas comerciales engañosas relacionadas con el servicio de suscripción Uber One.
El cambio suma 21 estados y el Distrito de Columbia a la denuncia presentado en abril en un tribunal de distrito de California. En un comunicado de prensa sobre el cambio, la FTC dijo: “Uber cobró a los consumidores por su suscripción sin su consentimiento, no cumplió con los ahorros prometidos, incluidas tarifas de envío de $0, y dificultó a los usuarios cancelar las suscripciones”.
Uber One cuesta $10 por mes o $100 por año y ofrece descuentos, entrega gratuita en Uber Eats, reembolsos en efectivo y beneficios adicionales.
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Un representante de Uber no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
En abril, Uber le dijo a CNET que cuestionaba puntos de la queja original de la FTC, alegando que la compañía no se registra ni cobra a los consumidores por Uber One sin su consentimiento, y que los clientes pueden cancelar en la aplicación. “(Las cancelaciones) tardan 20 segundos o menos para la mayoría de las personas”. Uber dijo: “A los consumidores que cancelaron (Uber One) nunca se les cobraron tarifas adicionales”.
La compañía agregó en ese momento: “Estamos decepcionados de que la FTC haya decidido seguir adelante con esta demanda, pero confiamos en que los tribunales estarán de acuerdo con lo que ya sabemos: los procesos de registro y cancelación de Uber One son claros, simples y siguen la letra y el espíritu de la ley”.
El cambio involucra a estados como Arizona, California, Nueva York y Pensilvania. Al contrario de lo que ha dicho Uber, la FTC dice que cancelar Uber One puede requerir navegar “hasta 23 pantallas y realizar hasta 32 acciones”.
Viento en contra legal
En 2024, hubo un apoyo generalizado en el gobierno federal y en estados como California para adoptar reglas de “hacer clic para cancelar” que requerirían que las empresas facilitaran a sus clientes la cancelación de suscripciones no deseadas a servicios en línea.
Sin embargo, este año un tribunal de apelaciones invalidó la versión federal de este reglamento.
La ley de renovación automática de California exige que las empresas con clientes en California les notifiquen cuando un servicio de suscripción está a punto de renovarse y prohíbe la renovación automática de una suscripción sin su consentimiento. Otros estados, incluidos Nueva York, Virginia e Illinois, tienen leyes similares.
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