El Departamento de Transporte del presidente Donald Trump está en el proceso de deshacer aún más la política climática adoptada por el presidente Joe Biden. Según un reglamento propuesto por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras, los estándares de eficiencia de combustible para automóviles y camionetas ligeras se reducirán a un promedio de 34,5 millas por galón en el año modelo 2031, por debajo del estándar de 50,4 millas por galón que formaba parte de los planes de Biden para aumentar la aceptación de los vehículos eléctricos entre los conductores estadounidenses.
La medida se esperaba desde que Trump asumió nuevamente el cargo. El secretario de Transporte, Sean Duffy, ordenó a la NHTSA que revisara los estándares de eficiencia de combustible en enero, el día después de asumir el cargo. El gobierno actual también eliminó un crédito fiscal para la compra de vehículos eléctricos durante el verano. Mientras tanto, los fabricantes internacionales están dando pasos rápidos en la construcción de mejores vehículos eléctricos y ofreciendo a otros mercados modelos más interesantes que no llegarán a Estados Unidos gracias a los aranceles.
Si bien Trump afirmó en el anuncio de hoy que el cambio reduciría el costo promedio de un automóvil nuevo en $1,000 y ahorraría $109 mil millones en cinco años, los precios de la gasolina están en camino de aumentar si la Agencia de Protección Ambiental logra revocar la determinación de que el cambio climático está causando daño humano. A esto se suman los incalculables costos financieros y humanos de un número creciente de fenómenos meteorológicos catastróficos pronosticados a medida que el planeta continúa calentándose.